El equipo colchonero cayó 3-2 ante Racing de Santander como visitante en la vuelta de las semifinales, pero como en la ida había goleado 4-0 se aseguró su lugar en la definición, donde enfrentará al Sevilla.

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ALEGRIA. Jurado grita su gol junto con el Kun Agüero.

El 4-0 como local conseguido en el partido de ida de las semifinales de la Copa del Rey le daba mucha tranquilidad al Atlético de Madrid ante el Racing de Santander. Por eso, en la revancha disputada en El Sardinero, no tuvo mayores problemas y, pese a caer 3-2, se aseguró un lugar en la final –enfrentará al Sevilla- tras 10 años.

El gol en contra de Juan Valera, a los dos minutos del primer tiempo, hizo ilusionar al Racing. Pero enseguida, a los seis, fue José Moratón, del local, quien devolvió gentilezas y así el Atlético de Madrid respiró tranquilo. Es que el Racing necesitaba cinco goles más para dar vuelta la eliminatoria.

Entonces, el Aleti manejó la pelota y dominó el ritmo del juego. Y, ya en el segundo tiempo, a los 6, apareció la magia de Agüero para habilitar a José Manuel Jurado, quien definió con mucha calidad para marcar el 2-1 para la visita.

Si la suerte del Racing parecía sentenciada, más aún cuando a los 24' se quedó con diez tras un codazo alevoso de Christian a Ibrahima, quien reemplazó al Kun. Sin embargo, con mucho orgullo fue decidido a no volver a caer y logró darlo vuelta con los tantos de Xisco y Tchité en los dos últimos minutos.

De esta manera, el conjunto de Quique Sánchez Flores se medirá en la final con Sevilla, en busca de su primer título en los últimos 14 años. Si bien no fue confirmado oficialmente, todo hace pensar que la final se disputará el 26 de mayo, en el estadio Santiago Bernabéu, nada menos.