Fue 1-0 en el Nuevo Gasómetro con un gol de Carranza, en el primer tiempo. El equipo del Turco Asad ganó en sus dos presentaciones y está en lo más alto de la tabla con 6 puntos. El local mostró un flojo rendimiento en su estadio.
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]César Carranza engaña a Migliore y define para el 1-0 de Godoy Cruz sobre San Lorenzo. Godoy Cruz de Mendoza sorprendió a San Lorenzo con un ajustado triunfo por 1-0, en el Nuevo Gasómetro, y quedó como único puntero del Clausura. El gol del conjunto dirigido por Omar Asad lo anotó el delantero César Carranza, a los 35 del primer tiempo. El arquero Nelson Ibáñez, reciente convocado por Diego Maradona para el seleccionado argentino local, fue la figura del partido.
El equipo mendocino, que acumula seis unidades, fue el único que pudo repetir la victoria de los siete que ganaron en la jornada inaugural, aunque Banfield -actual campeón- debe completar su partido con Argentinos.
El técnico local, Diego Simeone, formuló un planteo agresivo con tres delanteros y dos laterales de continua vocación ofensiva para atropellar a Godoy Cruz, que consiguió una inmerecida ventaja en el primer tiempo.
El desarrollo del juego fue un patrimonio exclusivo de San Lorenzo, que tuvo como mayor virtud la presión para recuperar la pelota y como principal defecto la inestabilidad defensiva de un equipo propenso a la descompensación. En la búsqueda del arco rival, el local se excedió en vértigo y a menudo la producción ofensiva se diluyó con imprecisiones en los metros finales. El Papu Gómez, activo pero confuso, fue una síntesis de las características del equipo de Simeone, que de todas formas tuvo tres ocasiones de peligro para anotar.
Dos de ellas, a los 19 y 38, las devolvió el travesaño y la última, a los 43, la tapó el arquero Ibáñez ante un remate del uruguayo Pablo Pintos. Godoy Cruz avisó con tiros de media distancia en los primeros 25 minutos -ninguno de riesgo-, alertó con una aparición de Martín Aguirre dentro del área a los 29 y no perdonó cuando Carranza dominó una pelota frente a Pablo Migliore y definió tras un amague. La inesperada desventaja llenó de presión a San Lorenzo y acentuó las carencias en la carrera contrarreloj por adueñarse de la punta del torneo.
En el segundo tiempo, el local agotó todas sus variantes ofensivas y evidenció un problema que arrastra desde el semestre anterior: la falta de gol. La convivencia del histórico goleador Bernardo Romeo junto con Bordagaray y el uruguayo Alfaro -de poca gravitación en su debut- no aportaron soluciones para las urgencias del local.
Godoy Cruz, mientras esperaba una posibilidad de contraataque para asegurar el triunfo, hizo circular la pelota con prolijidad con el fin de quitarle ritmo al partido. Ibáñez le tapó a Bordagaray las dos ocasiones más riesgosas del segundo tiempo: la primera a los 13 con el cuerpo y la segunda a los 24 con una magnífica reacción. Esa acción fue la última que tuvo San Lorenzo para empatar el partido, antes de quedar envuelto en la impotencia de un equipo con superpoblación ofensiva pero sin ideas claras para evitar la derrota.